Es sábado en la tarde, la plaza del pueblo está más activa que lo usual, hay una carpa instalada, escenario, amplificación, instrumentos, fiesta, la Fiesta de la Carmela. Una celebración anual que anteriormente se realizaba el día de la Virgen del Carmen, pero el nuevo alcalde decidió separar las dos festividades para darle un carácter más laico y cultural a la Fiesta de la Carmela. Son las 17:55 de la tarde, el conjunto folclórico “Andén” está instalándose en el escenario para realizar su presentación, la gente espera, aprovechan de comprar algo para comer o tomar en los distintos puestos y carros que están instalados en la plaza. Mientras tanto en calle Ibieta con Baquedano, aproximadamente a 6 cuadras de la plaza, se escuchan gritos y arengas, se ven pancartas con consignas, un grupo de ciudadanos avanza por la calle, ¡Es una protesta! ¡Y avanza hacia la plaza! Una señora preocupada toma un colectivo para llegar antes y avisar a la organización del evento de la marcha que viene en camino, a lo lejos se distinguen unos gritos: “¡No, no, no nos moverán…” se acercan… pronto llegarán… ¡Están en la esquina! ¿Son mujeres? ¿Son hombres y mujeres? ¡Son mujeres y hombres travestidos! Sus pancartas tienen la leyenda: #YoFuiLaCarmela. “¡No, no, no nos moverán, somos las Carmelas, la original!” ¡Es el Sindicato de Intérpretes de Carmelas que vienen a hacer una funa porque no fueron invitadas!
(Realmente somos nosotros y nuestros amigos colaboradores y esta es nuestra intervención artística para la Fiesta de la Carmela, hace unas semanas atrás el Municipio nos consultó si podíamos hacer alguna intervención teatral, ya que querían que “El Teatro” estuviera presente en la fiesta dedicada a un personaje de Teatro, así que junto a los jóvenes del Karro Cultural ideamos esta intervención dando a entender el carácter ficticio del personaje, ya que algunas personas hablaban de la provinciana creada por Isidora Aguirre como si realmente hubiera existido, una vez que empezamos el acto en la plaza, la gente entendió de qué se trataba y lo disfrutaron, especialmente viendo a sus vecinos jugar por un momento a ser la Carmela).