BitácoraResidencias de arte colaborativo

Residencia: Cuentos naturales Purén - Malleco, La Araucanía - 2017 Residente: Katherine Guerrero
Publicado: 21 de diciembre de 2017
Llahueñma domo y Espíritu Bueno

En el campo hemos aprendido muchas cosas sobre la tierra, algunas historias antiguas y mitologías. El sector Lolonco nos ha acogido durante casi toda nuestra residencia haciéndonos sentir en casa, este lugar nos ha entregado una forma inexplicablemente intangible. Uno de los objetivos de nuestra residencia era la recolección de cuentos o mitologías, y una de las historias que recogimos fue la llahueñma domo tal como señalamos en una bitácora anterior, esta proviene de la mitología mapuche, llahueñma es el espíritu de una mujer que se sanó con plantas medicinales, se dice que llahueñma significa aprendiz de machi y domo mujer. Estamos con la familia Alonso finalizando los espíritus, en representaciones de llahueñma domo y un pillán (espíritu), destacando que es un espíritu bueno, para hacerlo, se requirieron semanas de conversaciones y encuentros para poder llegar a formar algo así, hoy vertimos agua al mimbre para poder ir tejiendo las terminaciones. Hay mucho sol y el mimbre se parte fácilmente porque se seca muy rápido. Para poder trenzarlo, nos explican que en estas fechas es mejor hacerlo por la mañana muy temprano, casi a la salida del sol, porque el mimbre conserva la humedad que trae la noche. Seguimos tirándole agua con una jarra plástica hasta que, finalmente, de tanta humedad, se puede doblar sin quebrarse y podemos terminar su falda. Después de esto, vemos cómo podemos ponerle la cabeza, ya que anteriormente estuvimos probando cómo unirla al cuerpo y no nos quedó bien, pero ahora pudimos hacerlo ya que días atrás hicimos otra cabeza más acorde al porte del cuerpo. Al unir la cabeza con el cuerpo vemos a llahueñma domo en nuestra versión salida de la imaginación, ahora el espíritu bueno tiene compañía y podrán estar juntos con el resto de animales creados a partir de la mitología de kai kai y treng treng. Al verla hecha, comenzamos a recordar todos los procesos que tuvimos que pasar con las personas para llegar a la creación de todo esto, un gran aprendizaje colectivo que nunca olvidaremos, o por lo menos yo siempre lo recordaré, miramos todas las creaciones y nos preguntamos si nos volveremos a ver con la Familia Alonso. Como eso no se sabe, se lo dejamos al destino.

Nos ocultamos del sol, tomamos a llahueñma y al pillán, y vamos también a dejarlos en un lugar con sombra ya que mucho sol puede poner débil el mimbre hasta quebrarlo. Después de dejarlos bajo un techo, vamos a almorzar, este será uno de los últimos almuerzos, o por lo menos por ahora, junto a la familia Alonso, y como se nos hizo costumbre, nos quedamos conversando un buen rato hasta partir de nuevo a casa para poder continuar con el resto del trabajo.

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