El agua está asociada a los sentimientos, primer elemento que los seres humanos buscamos para la purificación y regeneración. El renacimiento interior y espiritual. En exceso se rebalsa y su carencia ha sido considerada una maldición de los Dioses de diversas culturas en miles de años.
El río Hurtado tiene una longitud de 125 km y un caudal promedio de 3,36 m3/s, está dividido en sectores para su administración de aguas de regadíos, hasta llegar a la reserva de Recoleta. Con la inminente emergencia climática a través del proceso de calentamiento global, y factores extractivistas se ha observado una progresiva disminución de las capas de nieve y glaciares de las cumbres cordilleranas, llegando a bajar su caudal regular.
En Chañar hay 32,0 horas de regadíos a repartir, divididas en 42 acciones de agua, que transitan entre los 2 minutos a los 475 minutos de regadío, a través del canal Oratorio que cruza los campos y terrenos en interfaces de tiempo cada vez más escasos. Las acciones son herencias de otros tiempos, familias, acuerdos, pérdidas, intercambios.
El río Hurtado toma dirección sur oeste a la altura del Chañar, durante su paso por el pueblo forma pozas y pequeños caudales animados de agua. Al norte del Maray está la poza grande, en donde por las tardes de verano, se puede ver el viento atravesar los árboles creando melodías y abundan nidos de tricahues en sus bordes.
Más arriba en los valles que originan el río, se encuentra la Quebrada Amarilla, reserva a más de 4.000 metros de altura, con una enorme biodiversidad de fauna y flora autóctona altoandina, con bofedales, vertientes y humedales de altura, afloramientos superficiales de aguas subterráneas del río Hurtado.
Sumergirse en las aguas solo un momento para salir de nuevo, como una muerte simbólica, es lo que nos dice El ahorcado, XII arcano mayor en el tarot, representa el sacrificio, retornar a las fuentes y extraer de ella una fuerza nueva. Nunca nos bañamos en el mismo río. Por lo tanto nunca hay una única forma de fluir, las comunidades pueden dar sentido y dirección a sus aguas, cuidar de sus fuentes y resignificar el afluente.
Donde nace la sed es donde se acaba el río.
Ilustración y texto por Majo Puga.