Realizamos la primera jornada de Palín, nos juntamos tempranito en el “Mate Amargo”, espacio municipal para encuentros, eventos y festividades importantes. Este lugar es ideal para jugar al palín porque cuenta con una cancha de pasto bien grande e instalaciones bajo techo para comer y compartir. Marcamos la cancha, plantamos las banderas y partimos con una rogativa, los niños y las niñas estaban presenciando algo nuevo y se miraban con cara de pregunta. Bien conectados empezamos a jugar al palín, Juan explica los detalles del juego a medida que surgen dudas, pero rápidamente el partido empieza a tomar intensidad y en una media hora el juego fluye.