Las salidas a observar se fueron transformando en la forma de vincularnos con el entorno de los Balcones, los participantes miraban con libertad su espacio habitado, el lugar para nosotros, “los nuevos” era bastante quieto, no había muchos vecinos que transitaran por sus calles, y tenías la sensación de que todo ocurría dentro de las casas. Las fotografías nos fueron demostrando que nuestra primera idea era la correcta, las acciones colectivas eran escazas y se gestaban habitualmente en la sede de la Junta de Vecinos, lugar que era usado para las actividades de la comunidad.