BitácoraResidencias de arte colaborativo

Residencia: La Montaña: habitar historias en comunidad San Fabián - La Montaña, Biobío - 2017 Residente: Colectivo Charco
Publicado: 26 de octubre de 2017
Día de niños

Hoy pasamos el día junto a niños. En la mañana junto a los estudiantes de la escuela y en la tarde junto a Alexis, “Titin” y Benjamín. Las mujeres del comité femenino nuevamente cancelaron nuestro encuentro.

La sensación con la que quedé de ambas instancias de encuentro fue que se dio una mayor horizontalidad en el trabajo de la que pudo acontecer en otras instancias. Ello, por que dejamos de lado cierta jerarquización oculta que puede darse en el trabajo que realizamos. Con ello, me refiero a que ocurre una suerte de exceso de cuidado en no influir y en que sea la comunidad la que realice todo, siendo uno solo una especie de facilitador de instancias colaborativas. Sin embargo, tal disposición encubre otro tipo de paternalismo, donde uno pareciera querer eliminarse y que solo actúe el otro, una suerte de jerarquización inversa: nada más atentatorio contra un trabajo realmente horizontal. Ya que, si somos parte del grupo y si hemos aprendido de las personas acá, por qué no podríamos compartir nuestras experiencias y opinar de igual forma a como todos lo hacen… Eso es ser parte de un colectivo, tensionar las ideas, discutirlas y llegar a resultados.

Ayer, la relación fue mucho más multidireccional y colectiva; ya es difícil hablar de “la gente”, “los otros” o “la comunidad”, porque en cierta medida, nos sentimos parte. Ayer todos aprendimos y todos compartimos. Algunos estudiantes de la escuela llevaron sus cajas y compartieron distintos objetos con sus historias, al tiempo que otros compañeros los registraban en sus presentaciones. Y en la tarde, le mostramos a Alexis, “Titin” y Benjamín las obras que hemos realizado como colectivo, lo que fue algo completamente nuevo para ellos, así como para nosotros lo ha sido el aprender los distintos saberes que han compartido.

En este largo proceso (en términos de la residencia, ya que en términos cotidianos ha sido ínfimo) pienso que este es el momento en que algo realmente en conjunto puede surgir, emerger desde el afecto y la gratuidad, y que responda solo a la experiencia de los que aquí habitamos.

« Ir a residencia