Desde el principio de la residencia nos planteamos crear vínculos con los escritores del valle, siendo esta la tierra de la tan nombrada y re-nombrada Gabriela Mistral tenían que haber poetas, literatos, dramaturgos, lectores, en fin… y los encontramos. No a todos claro, acá entre los valles nunca vas a parar de encontrar y descubrir personajes, casas increíbles, diversidad de mundos, cuál de todos vive más escondido…pero se dio y estamos trabajando con el Grupo Literario de Cochiguaz y el Grupo Literario de Monte Grande.
Hoy Fuimos a reunirnos con los escritores de Monte Grande, cada cual leyó de su cosecha todos muy distintos: nosotros desde el mundo del teatro se notaba nuestro estilo dramático, Aladino que es poeta 100% local y admirador de Gabriela Mistral tiene su sello en sus rimas, escribe en rimas como se escribía antes, como escribía la poeta y su poética retrata la belleza y simplicidad de su tierra querida. Había dos poetas de Serena que estaban de visita y leyeron con sus métricas más urbana, más oscura, melancólica e intelectual. La Camila que es profesora en Pisco, tiene una poesía femenina y suave, sin embargo la Lía, también profesora y además músico, prácticamente cantaba mientras leía. Entre todos nos fuimos conociendo desde la intimidad que revela un lápiz y un papel.
Pasamos horas así, hicimos juegos de escritura, cadáveres exquisitos, pies forzados, etc. Lo pasamos muy bien y queríamos invitarlos a seguir trabajando. Les hablamos de la exhibición que queremos hacer y que creemos que serán fundamentales para escribir y publicar en el libro final, el Aladino nos pasó sus libros para seleccionar versos y con los demás nos pusimos en contacto por Facebook, mail, blogs, etc., para mandarnos textos, a todos les encanta la idea y están motivados.
Por otra parte los poetas de Cochiguaz van más adelantados, ellos muy ordenados y organizados ya han escrito varios textos a partir de la experiencia con las tejedoras. Esta semana también nos juntamos con ellos y nos leyeron sus nuevas creaciones. A partir de las obras de las tejedoras ellas escribieron historias y poesías, esto se puso muy interesante ¿o no?
MANOS DE NORTE
Entre churrascas, arrope, lana, feltro y trigo majado
están las manos
manos curtidas de sol, de huerta, de cloro y caricias
manos morenas y fuertes
callosas y amables
éstas manos son parte del paisaje
cómo si no…
Se mimetizan con él
con la roca y con el polvo
con la masa y el telar
capaces de arrastrar una vida y más
levantar niños,
arrancar zanahorias,
endulzar postres,
mecer cunas,
escribir poemas,
tejer historias.
Historias de silencio
cuentos de ojos disimulados
poemas de amores truncos
canciones de alegrías pequeñas
y versos de llantos apagados.
Manos inmersas e inmensas
manos que piden, manos que dan
manos.
Sin estas manos no hay valle,
sin sus arrugas no hay pan,
sin sus dolores no hay paraíso.
Las manos que apuntan al norte son las tuyas,
las que construyen, las que bordan verde sobre cerro seco,
las que tejen abrigo chal, abrigo frío, abrigo casa, abrigo mamá
las que recogen uva y enagua,
las que abiertas esperan, palma arriba, palma callosa
aunque nunca llegue, aunque nunca reciban
ahí están sus manos,
dámelas,
como una flor y nada más.
Valeska Pizarro,
Grupo Literario Cochiguaz
Texto escrito a partir de experiencias compartidas con grupo de tejedoras de Paihuano,
Proyecto Agarrando valle,
Residencias de Arte Colaborativo, Red Cultura, 2017.
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Gobierno de Chile
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