Esta semana ha seguido su curso.
A la espera de las reuniones trascendentales continuamos con la labor de darle vida a nuestro Centro Cultural Comunitario con diversas actividades.
Estuvimos con los niños del Sol Naciente y los llevamos al huerto. Allí ya inició el taller, por lo que ya están desmalezando y comenzando con las primeras labores para sembrar. Fuimos al salón y les propusimos un juego, les comentamos que la escuela va a ser un espacio de arte, cultura y educación, y les pedimos que imaginaran qué les gustaría que sucediera ahí. Las respuestas fueron variadas, pero algo había en común: bailar, cantar y una cancha para jugar fútbol atrás, al lado del huerto (el nuevo jardín se construyó sobre la cancha que había y el terreno de atrás de la escuela es gigante). Bailamos con ellos y luego dibujamos, el tema fue «Cómo me imagino la escuela hogar».
Para seguir con la gestión, hablamos sobre el Bingo que las tías del jardín están organizando y comentamos la petición de ellas de hacerlo en la Ex Escuela – Hogar. Están todas las ganas y las voluntades por lo que seguramente se llevará a cabo allí. A través de esta actividad, lograremos vincular no solo a los niños con el espacio, sino que también a sus padres, ampliando así la convocatoria de nuestro centro cultural. Labor fundamental para proyectar en el mediano y largo plazo los objetivos planteados para el Centro Cultural Comunitario.
En la tarde tuvimos la mesa ampliada en que estuvimos con aproximadamente 20 vecinos y vecinas, además de los representantes de las organizaciones con las que hemos colaborado sostenidamente durante todo este proceso.
De parte de SENDA se nos plantea la necesidad imperiosa de generar actividades para niños y adolescentes, evitando así los primeros contactos con la droga y orientándolos hacia un nuevo horizonte. Se sugieren a partir de este comentario clases de baile, de cueca; reforzamiento escolar y ayuda para hacer las tareas (las mamás no recuerdan las materias por lo que les resulta muy difícil apoyarlos en esto); que hayan juegos de plaza, una sede de scouts y potenciar las actividades de verano, con el fin de habitar el espacio, recrear a los niños en vacaciones y generar un espacio real para que las madres puedan dejar en resguardo a sus niños y niñas mientras trabajan, y hacer de esto un acto relevante y significativo en diversos temas.
Se decidió llevar a cabo una nueva jornada sabatina, con fecha 2 de diciembre. Se llamará “Unidos por la Cultura”, y será en la mañana, con juegos de agua para los niños y con Yoga y un taller de patrimonio. Se pone a disposición, de parte de algunos de los convocados, una profesora para clases de baile y un profesor de karate.
Al finalizar, se proyecta una completada comunitaria para todos los participantes de la jornada. Se empezarán a gestionar donaciones para eso también.
Finalmente, y dentro de las cosas más importantes de la reunión, nace la idea de habilitar un nuevo espacio, un salón que está en el patio interior. Un espacio ideal para dar clases pues cuenta con piso de madera. Hay que mover muebles, herramientas y limpiar el polvo acumulado por los años sin uso. Así, seguiremos recuperando y resignificando los espacios de esta Ex Escuela – Hogar, que hoy en día es cada vez más nuestro Centro Cultural Comunitario.
Ahí vamos…