Hoy nos juntamos para despedirnos. Era nuestra última sesión de laboratorio con los niños y niñas de San José. De a poco comienza nuestro proceso de cierre de la residencia.
Dibujamos nuestro momento favorito y conversamos de cada sesión, es siempre impresionante la buena memoria infantil, recordaban muchos detalles, tenían claridad absoluta de qué ejercicios les gustaba, algunos nos retrataban a nosotros, a Pilar, quien nos acompañó durante una sesión de fotografía y fue dibujada con su cámara colgada en el cuello. Hay mucho que aprender de cómo observan los niños y qué llama su atención.
Además teníamos reveladas las fotografías que ellos habían obturado, las miramos con atención y cada uno escogió una para ser colgada en un hilo afuera del comedor.
Para finalizar tomamos helado y nos despedimos en este día de calor.