El último empujón del Goyenechea fue un balde frío, pero un gesto más al fin y al cabo. Luego de un par de trabajos en torno al cuidado del medio ambiente, decidieron embarcarse en un último diseño a dos colores. Una vez hechas las matrices, las alumnas se tomaron un recreo del cual no regresaron. Actualmente no se sabe del paradero de las involucradas.
Es todo.