Apenas escuchamos el nombre del territorio en el que debíamos residir en esta ocasión, comenzaron a surgir espontáneamente las preguntas. ¿Serán efectivamente cuatro villas? si fuera una, ¿Porqué habría de estar dividida? ¿Cómo llegaron a ser una y/o cuatro? ¿Cuál será la historia detrás de ese nombre?
Nos recibió su relato en los primeros pasos que caminamos por sus calles.
En 1984 se construye la VILLA INDUSTRIAL, solución habitacional para la gente menos favorecida de San Felipe. En 1991 se le suma un conjunto de viviendas progresivas para erradicar algunas tomas que termina llamándose VILLA 250 AÑOS, la misma que dos años más tarde vería nacer su segunda etapa: la VILLA RENACER. Finalmente, en el año 2000 se construye la VILLA SOL NACIENTE, para terminar de configurar lo que hoy conocemos como el BARRIO “4 VILLAS”.
Nuestro primer encuentro con la comunidad que la habita fue en el marco de una actividad de Cohesión vecinal, que se realiza mensualmente y está intencionada por los integrantes de QUIERO MI BARRIO. Fuimos invitados a la once que se preparó para todos los convocados y que, en esta ocasión, permitió la presentación de algunas maquetas y fotografías para el arreglo de la plazoleta, actividad que está siendo gestionada en estas reuniones mediante el rescate de opiniones e ideas de los propios vecinos de las 4 villas.
Esta instancia nos permitió presentarnos como compañía y contarles de qué se trataba nuestra presencia en el territorio y la idea del proyecto que queríamos construir junto a ellos. El entusiasmo fue inmediato y los relatos de uno de sus grandes logros de estos últimos años: La realización del FESTIVAL DE LA VOZ DE LAS 4 VILLAS y sus posibles proyecciones futuras, así como otras muchas inquietudes de muy diversas índoles, llenaron las horas que compartimos con ellos en el primero de muchos encuentros que se nos vienen por delante.