BitácoraResidencias de arte colaborativo

Residencia: La Ligua Puebla La Ligua - Cecrea La Ligua, Valparaíso - 2019 Residente: Enrique Alberto Flores Barrenechea
Publicado: 15 de enero de 2020
 Valle Hermoso  y los lindos chalecos de La Ligua

Estamos en verano, tiempo  en que la ropa de abrigo importa  bien poco, pero estoy en La Ligua, pueblo que es reconocido por sus tejidos y chalecos de lana, es solo darse una vuelta por el centro y ver cantidad de locales comerciales y tiendas de chalecos de confección local, “pero eso no es nada si estas en La Ligua y  quieres ver chalecos debes ir obligatoriamente a Valle Hermoso” eso me dijeron varias personas de acá,  esta a unos 5 km del centro de La Ligua, para llegar la gente toma una micro o un colectivo que en sus recorridos pasan por el llamado “ ex rio Ligua” que desde hace harto rato esta bien seco , pasando eso aparece un letrero que dice “ Bienvenidos a Valle Hermoso”  y de la nada  aparecen un montón de tiendas de chalecos  a ambos costados del camino, es algo sorprendente ver tantas tiendas de venta de chalecos y tejidos varios, como ponchos para huasos, bufandas, gorros, una oferta increíble, claramente Valle Hermoso tiene vida por el comercio de los tejidos, que tiene un mercado especifico para turistas y comerciantes que compran a precio mayorista para revender chalecos en otras regiones, igualmente  en Valle Hermoso se nota un animo y un aire decadente, hay algunos locales muy grandes que en su mayoría fueron construidos hace varios años, antes de la época del retail y de las masivas importaciones de productos chinos, con los que los chalecos de La Ligua  ahora deben competir, la gente de Valle Hermosos se queja  y dicen que quedaron botados, que no se favorece el producto nacional, que en Chile no se puede crear nada propio.

 

El caminar por valle hermoso es como caminar en un pueblo de una película del “ Viejo cow boy” ; una solitaria  y árida calle principal que es la carretera, al costados tienditas con productos que se exhiben,  algunos restaurantes en donde venden completos, dulces y empanadas, almacenes que incorporan el sistema de sencillito para que los turistas saquen dinero, porque obviamente no hay cajeros, una comisaria de Carabineros  instalada en la mitad, por donde se pasean unos caballos y muy poca gente circulando, uno que no es de ahí se siente muy observado y casi obligado a mirar todo, es doloroso ver la poca cantidad de gente .

 

En mi paseo  por Valle Hermoso me tente por compara un chaleco, vi uno amarillo “chillón” muy raro, pregunte por el pero me quedaba chico, de inmediato me empezaron a ofrecer de todo, pero yo quería un chaleco amarillo “chillón”,  pregunte en varios lugares pero nada me quedaba bien, seguramente el color que yo quería no estaba en las preferencias del publico habitual que prefiere chalecos muy tradicionales, como fue lo que me dijo una niña que vendía  alimentos veganos en La Ligua; “el problema de los chalecos de acá es que son casi puros modelos de abuelitxs” y claro tenia algo de razón, la producción es muy similar y muy orientados a un publico muy adulto y tradicional, o similar a lo mismo que ofrece el retail y sus productos traídos de la China.

Seguí buscando y  como no encontré el chaleco amarillo chichón, me decidí al final  por algo de mi color favorito ; el Lila. En las tres tiendas donde pregunte me miraron con asombro, ¿como es posible que un hombre quiera usar un chaleco lila?  y me ofrecían de todos los otros colores posibles, negro, azul marinos, colorado, café etc, etc, al final obtuve lo que deseaba.

 

Esta fue mi primera aproximación al chaleco de La Ligua, quedan historias realmente increíbles de chalecos gigantes y botones de cobre.

« Ir a residencia