Cumpliendo con nuestro rito semanal realizamos un cuarto encuentro, esta vez volvimos a Polcura a “La Ciudad del Niño”. Esta reunión marca la mitad del proceso de nuestra intervención en el territorio de Huépil, Trupán y Polcura, y presentamos a los niños y niñas a Diego Bravo, muralista del Colectivo Epew que nos acompañó en nuestra anterior residencia en la comuna de Tirúa. A través de videos mostró su trabajo y tuvo un diálogo abierto con todos los niños y niñas para incentivarlos a seleccionar las historias más representativas del sector de Tucapel para que sean plasmadas en el diseño de los murales que finalmente quedarán en cada escuela.
En el diálogo con todos fue posible descubrir que las historias más representativas están ligadas al oficio de los antiguos arrieros, contaron a Diego las historias de cuatreros que acecharon la zona como los Pincheira o el finado Rivas, la fiesta de la “Cruz de San Francisco” también fue mencionada como una celebración muy esperada por toda la comunidad de Villa Rastrojos. Estos relatos quedaron plasmados en grandes cartulinas donde en varios aparece la figura del antiguo Tren.
Para sellar esta jornada realizamos una ceremonia que marca la mitad de nuestro trabajo haciendo entrega a cada participante una mochila representativa del grupo que dan vida a a este proyecto “Estación Cordillera” que lo componen niños y niñas de escuelas rurales de Polcura, Mañihual, Huéil y Trupán.