Esta semana llegaron colaboradores al proyecto: la Martina Knittel desde Valparaíso (diseñadora y huertera) y Alejandro, un colombiano que vino de «polizonte» al proyecto, que estaba viajando por Chile y llegó invitado por la Marti y obviamente muy bienvenido por nosotros.
Le propusimos al profe del ciclo superior (5to a 8vo) trabajar con sus alumnos sobre la idea de re-hacer el boletín que editaban los alumnos de la escuela tiempo atrás. Al principio (y creo que tenía que ver con nuestra asociación con el profe y la clara oposición de los niños Galenses hacia la autoridad), nadie se mostró muy emocionado con la idea, dijeron que no querían y que no iban a participar.
Entonces la siguiente sesión hablé con ellos: que nosotros no éramos sus profes, que no íbamos a obligar a nadie, y que veníamos a trabajar con ellos en un proyecto que a nosotros nos motivaba y que toda la isla recordaba con cariño, y lo más importante que si no les interesaba a ellos no lo íbamos a hacer. Entonces empezaron a motivarse: «¡ahh! Pero ¡esto se va a imprimir?”, “yo tengo un poema”, “yo quiero hacer una noticia y además un cuento que ya tengo escrito”, y de a poquito todos empezaron a decidir qué iban a hacer. El viernes todos habían traído algo de material y empezamos a editar. Sólo teníamos una hora, pero las niñas se quedaron hasta mucho más tarde con nosotros:
La Paz nos pasó dos de sus poemas y dibujos que tenía escritos, además ayudó al Eduardo a hacer sus predicciones del tiempo en tono chistoso e hizo dibujos sobre las noticias de otros. La Kari nos pasó los videos de unas entrevistas que le habían hecho a personajes típicos de Gala. La Alison hizo el horóscopo con una clara predilección hacia su propio signo. La Anakena nos pasó un cuento sobre su padre: “Un Pascuero en Puerto Gala”, y además se motivó para escribir una noticia sobre la supuesta llegada de la señal de celular tan esperada a Gala.
El Maikol escribió una noticia cortita pero bien escrita y chistosa sobre el pescador Lleri que se quedó en pana al ir a pescar y lo tuvieron que rescatar. Y el plato principal: la Josefa escribió una crónica de denuncia hacia sus profesores que no les pagaron los queques para juntar fondos para la gira de estudios, todo en tono de broma, y que finalmente los profes aceptaron diciendo que la próxima edición responderían con una carta al director.
Querían seguir incluyendo noticias pero les dijimos que teníamos una hora de cierre de la edición, así que la Kena se quedó con nosotros hasta que imprimimos el primer tiraje de los 50 ejemplares.
Estos ejemplares los presentamos el sábado 14, aprovechando que habían organizado el lanzamiento de un stop motion que hicieron con un cineasta que vino a las islas, y que venía gente del Consejo de la Cultura y de la Fundación para la superación de la pobreza. En esta instancia montamos una mini expo de los trabajos del taller textil, presenté el proyecto a la gente que asistió (que eran bastantes) y le entregamos a los niños el primer tiraje de 10 ediciones del fanzine que hicieron al principio, que regalaron e intercambiaron entre ellos.
Finalmente presenté la re-edición del boletín “La nueva generación”, como lo bautizaron los mismos alumnos, y resultó que tuvo muy buena recepción, ¡la gente se lo leyó entero al tiro! Y se nos fueron todos los ejemplares… de hecho llegaron hoy a pedirnos más. Pero sobretodo fue lindo ver que se reconocían a sí mismos y a sus amigos en el proyecto, y causaba risas y comentarios. Y el mayor éxito fue que finalmente logramos el proceso colaborativo de una publicación con el grupo de alumnos. Pensamos que esta semana vamos a hacerles una plantilla análoga para poder replicar la diagramación del diario incluso cuando nosotras no estemos. Y la Romi (directora y profe) nos dijo que ella se motivaba a aprender indesign para seguir el proyecto.