La carretera cinco sur atraviesa el pueblo de Pozo Almonte, al transitar en ella en dirección norte sur, da la sensación que a la séptima cuadra, el pueblo se termina, pero al llegar a una estación de servicios, vemos al lado derecho, el deteriorado sector Las Quintas.
Sus calles de tierra dejan entre ver un barrio vulnerable, de casas que se ocultan con planchas de zinc puestas en vertical. La primera impresión es que nadie viviera allí, pero al escuchar ruidos y sentir movimientos, comprendemos que las personas que allí habitan, no se quieren dejar ver. La escasez de personas en sus calles pasa a ser un panorama habitual logrando conversar con sus habitantes fuera del sector.
En la entrada de Las Quintas, el único local comercial, al lado, un iglesia evangélica.