Pensar solos era una pérdida de tiempo. Debíamos compartir nuestras inquietudes con el resto del pueblo para tener algún tipo de respuesta.
María Elena es un pueblo privado, una comuna que no es como ninguna otra comuna. SQM, la Sociedad Química y Minera de Chile, no solo es una empresa que se dedica a la explotación de recursos naturales, sino también son gobernantes de la pampa, donde las autoridades llevan nombres como “Jefe de campamento”… “campamento” ¿no era esto una comuna? Las paradojas son tantas que explicarlo en bastas oraciones es poco. Es tal la impregnación del pueblo con la empresa privada que obviarla es cotidiano. Cómo no, ¡siempre ha sido así! Pero no para nosotros. Nos preguntamos cómo es llevadera una vida de tales condiciones con reglas tan arbitrarias; cómo pensar en el porvenir si está todo cerrado por contrato.
Fue durante esta semana cuando nos dijeron que “María Elena necesita la independencia de la empresa”. Después de eso frenamos el proyecto. Debíamos pensar bien lo que vamos a hacer.