Comenzamos esta semana con el espacio de trabajo que gestamos con la organización de mujeres, el cual intentaremos funcione de manera regular para abordar temáticas en torno al cuerpo, autoestima y autocuidado. Consideramos muy relevante plantear la relación conceptual entre cuerpo-casa-isla, donde el modo que en que habitamos estos tres territorios es la problemática en torno a la cual se articulará el trabajo performático en las casas de los habitantes de Isla del Rey. Es por esto que es de suma relevancia el trabajo que comenzamos con las mujeres, donde esperamos ingresar y sumergirnos en este primer territorio: el cuerpo.
Dado las inclemencias del tiempo reunirse es más difícil. Esta semana hubo temporal todos los días. La fuerza del viento y la lluvia impidieron que todas las participantes pudiesen llegar, pero las vecinas cercanas se sumaron al encuentro de esta primera sesión. Así, logramos sumergirnos en una primera aproximación a la experiencia de la conciencia del cuerpo en movimiento, introduciendo a través de su realidad material conceptos de anatomía, técnicas somáticas y autocuidado. Al cierre de la sesión siempre realizamos una reflexión colectiva respecto a la experiencia, donde esta vez las participantes dieron cuenta de la relevancia de generar y sostener espacios como éste, donde ellas tengan una instancia, fuera de las responsabilidades laborales y del hogar, donde cuidar el cuerpo, aprender, y compartir con sus vecinas y amigas.
También comenzamos a preparar la producción de material para la primera performance desde una experimentación de danza contemporánea con Millaray, la nieta de la Señora Clotilde, la cual es tan dueña de la casa como su abuela. Comenzamos a trabajar desde su natural apertura al cuerpo como dispositivo performático y en torno al juego sobre la imagen y no-imagen del cuerpo.