Para conocer más acerca de los beneficios y manejos de recursos de la comuna de Pozo Almonte me acerque a la oficina del Programa de Desarrollo Territorial, PDTI, con el propósito de que me pudiesen entregar una visión más amplia del desarrollo agrícola de la comuna. Les comente que me había acercado a las dos experiencias de chacras a la salida sur de Pozo Almonte. Les planteo algunas dudas que tengo; relacionadas principalmente con el saber por qué se planta tanta alfalfa y no se prefiere potenciar un desarrollo agrícola vinculado a una mayor diversidad en la producción. Ellos sin querer entrar en más detalles, me invitan a un visita en terreno a la Colonia Agrícola de Pintado, ubicada a unos 45 kilómetros de Pozo Almonte.
Viajo, con Ángela Gallardo, encargada de fomento, Viviana Chaves, coordinadora PDTI comuna Pozo Almonte y el Agrónomo Israel Veles. En el trayecto en auto me explican que asistiremos a una reunión y luego visitaremos a un matrimonio, Don Gerardo Cortes y Jessica Gallardo del sector Nuevo Amanecer de la Colonia de Pintado.
Luego de varias vueltas buscando una reunión que no se realizó, llegamos a la casa del matrimonio que me habían mencionado. De inmediato me doy cuenta que no eran Aymaras, ellos nos cuentan que llegaron hace alrededor de diez años, por un acuerdo que hicieron con bienes nacionales. Al recorrer su espacio, me percato de inmediato que es un lugar de extensa producción, de hecho, estaban en plena cosecha de cebolla, bien grandes, sobre el suelo en un plástico, para mi sorpresa. Sigo avanzando por el territorio y me encuentro con un cultivo de; lechugas, betarragas, acelgas, albaca, cilantro, manzanilla, alfalfa, zanahorias y que me perdonen si es que olvido de otro cosa más. Era ya demasiado sorprenderte ver tantos cultivos en medio del desierto.
La producción en este lugar es muy eficaz, existen técnicas y maquinarias agrícolas que favorecen el trabajo. Me encontré con cuatro personas trabajando, tres recolectaban las hortalizas y una lavaba algunas cosas en un espacio en donde habían cuatro tinas de baño sobre una estructura de madera, construida artesanalmente por ellos mismos, en ese espacio también existía una pizarra, donde anotaban información de las labores. La pared se vestía de verde con todas las lechugas, acelgas y cilantros tan bien ordenados y frescos.
La señora Jessica me contaba que esta producción era para un cliente de Antofagasta y que dentro de la comuna no tenía mucha venta, así que eso la había llevado a tener que ofrecer sus productos fuera de la región. Por otro lado Don Gerardo Cortes, se destaca por su innovación, ahora trabajaba en una siembra de melones más tardíos, para tener cuando nadie tenga. Era una prueba que iba a arriesgarse a probar.
A todos y todas nos sorprendió la llegada de Pedro Aguirre, quien es el CAR de la comuna. El CAR está conformado por un dirigente de cada comuna, que representa los intereses de los agricultores en el Consejo Asesor Regional de INDAP, espacio de intercambio entre esta institución y los agricultores que busca mejorar la relación de cooperación entre el servicio público y sus usuarios, en torno a la estrategia de desarrollo productivo, organizacional y empresarial, ejes de intervención y gestión de la Dirección Regional. Pedro Nos habló de la transformación que está teniendo PRODESAL a PDTI, en donde se busca que los agricultores tengan el control y el poder de decisión de las medidas de implementación de los proyectos o beneficios.
Frente a esta información, todos los que estábamos en la mesa nos quedamos preguntándonos cómo es posible que las desiones de cada sector se tomen en Santiago, de cómo va a ser viable realizar y llevar a cabo decisiones en un territorio tan ajeno al nuestro, y reflexionamos en torno a al centralismo que tanto nos afecta a lo largo de todo Chile. Si bien se entiende la medida de gobierno de querer entregar más derechos de participación a los agricultores, se comentó en la mesa, que muchos de ellos aún no están preparados para eso. Es importante mencionar que los agricultores de la comuna además de recibir un apoyo económico por parte de estos programas de gobierno, también reciben un subsidio por parte de las mineras que son convenios con diferentes sectores dependiendo del departamento de organizaciones comunitarias de cada minera. El cual funciona año tras año a lo según los compromisos de ambas partes. Nuevamente reflexiono en torno a si son tan beneficiosos o no estos beneficios económicos y si no serviría más tener un real apoyo para poder tener control y soberanía de los recursos naturales.
No podemos saber lo que va pasar en el futuro, pero sí sé que durante esa tarde, estando ahí debatiendo y compartiendo todos quisimos construir todos juntos una nueva realidad agrícola chilena.