Ad portas de terminar con los procesos de mapeo emocional y social del territorio más el proceso de intercambio de saberes a través de clínicas de obra de bordado tradicional dirigidas por las propias participantes, hemos buscado propiciar la transversalidad de la experiencia, en donde se sociabilizaron los conocimientos previos de la comunidad y nuevas técnicas tradicionales de bordado a través de procesos y trabajo colectivo colaborativo en la Plaza Oasis y en la sede de la Junta de Vecinos N° 4 de Baquedano.
Utilizando telas, lanas, aguja y bastidor, se promovió la reflexión social plasmada en consignas bordadas y la generación de iconografías locales inspiradas en el territorio, a través, de la visión de los niños y niñas, quienes siempre se han sentido marginados de procesos y decisiones colectivas.
Estas dinámicas de bordado y dibujo experimental han sido el medio para que la comunidad pueda expresarse desde la emoción con el objeto de plasmar signos, diseños, trazos, esquemas, intervenciones o mensajes al más puro estilo naiff en espontaneidad e ingenuidad, colores brillantes, contrastados y ausencia de perspectiva.
Todas las dinámicas han sido una estrategia poderosa de expresión social que ha posibilitado un intercambio de experiencias y sentimientos posibilitando un acercamiento entre personas, lo que ha permitido conocerse mejor, superar trabas emocionales y sociales, integrarse a las realidades de otros con empatía, atendiendo las individualidades y diferencias del colectivo.
Todos estos procesos nos llevaron a reflexionar sobre temas sociales, éticos, morales, ideológicos y valóricos, memoria, nueva memoria, responsabilidades colectivas para situar, reconceptualizar y subvertir las consignas.
Dinámicas, estrategias, procesos que bien valen hacerlos acompañadites de una buena once colectiva.