BitácoraResidencias de arte colaborativo

Residencia: Pampa renacer Sierra Gorda, Antofagasta - 2018 Residente: Maximiliano Sepúlveda
Publicado: 3 de marzo de 2019
Fin de proceso, conversatorio y coctel colaborativo.

Hoy nos reunimos dos horas antes de lo normal, para preparar todos los detalles del último gran hito del proceso. A las 5 pm ya estaba todo listo gracias a la colaboración de las mujeres, niños y niñas que como es de costumbre opinan y resuelven sobre la disposición de los espacios, la forma de exhibir los resultados, dónde hacer el coctel y el conversatorio sobre el proceso.

Una vez reunidos en comunidad y junto a la Seremi subrogante de Cultura Valentina Fernández y Álvaro Soria de Red Cultura Antofagasta, comenzamos a compartir, dialogar y conversar sobre el proceso, la participación y colaboración, experiencias personales y colectivas, como también la visualización y proyección a futuro del proceso y sus dispositivos. La comunidad de Baquedano que participó en nuestro proyecto “Pampa Renacer” se comprometió a gestionar un espacio público para la exhibición permanente del mural textil, el cuál será resguardado por Ángela hasta que llegue ese momento, al igual que las pancartas de los niños y niñas (recordemos que no tuvimos respuesta del alcalde a nuestra petición de exhibir el mural textil en el espacio público). La comunidad acordó reunirse los días miércoles a las 18 hrs. en la Plaza Oasis para seguir intercambiando conocimientos en técnicas de bordado y telar mapuche básico, una excusa para seguir reencontrándose, auto reconocerse, sociabilizar, crear nuevas amistades, nuevas redes de apoyo, relevar la memoria colectiva, relevar los bondades, carencias y conflictos del territorio.

Nos sentimos felices de haber vivido esta experiencia y orgullosos de los resultados que fueron alcanzados gracias a la tenacidad, el esfuerzo, la convicción, la empatía y todo el amor que pusimos en la residencia. No solo nos ganamos el cariño de la comunidad, especialmente la de niños y niñas, adultos mayores quienes comprendieron que estas iniciativas son vitales para hacer comunidad, para reivindicar la existencia de las organizaciones comunitarias y sus objetivos, para humanizar más las relaciones vecinales, para organizarse y romper con el histórico adormecimiento de conciencias, para que el abuso y el poder deje de pasarles por encima, para empoderar a la comunidad en asuntos de desarrollo local, para conocer las herramientas y estrategias que tienen a favor para combatir la mano negra que siempre existe, para abrir los ojos y ponerle el cascabel al gato.

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