La primera semana de este nuevo año seguimos con las reuniones con sus dirigentes sociales, varias estaban agendadas entre el 2 y el 4 de enero.
La primera reunión fue con la directiva de la Junta de Vecinos N°1 quienes fueron muy hostiles y más que interés, demostraron desagrado por nuestra presencia, debemos recordar que en el primer acercamiento con esta agrupación de vecinos su dirigente dijo textual “otros artistas chantas que solo vienen a lucrar con nuestro patrimonio”en relación a experiencias anteriores de trabajos de artistas en la zona, como el bullado proyecto de pintores en la pampa, las dos esculturas patrimoniales que la comunidad quiere destruir, ya que según ellos, no les representa en absoluto, como también el caso del mural de mosaico. Tres veces tratamos de explicar los objetivos y alcances de la residencia, pero la verdad no hubo apertura a tratar de entender, más bien tergiversar la información que proporcionamos junto a Álvaro Soria de Red Cultura Antofagasta en dicha primera reunión. En fin, es como sembrar en terreno infértil, envidioso, con mala fe y mala energía.
Lamentablemente la dirigente de la Agrupación Artística Cultural “Sergio A. Vega Fernández” y la dirigente de la Agrupación Animalista “Patitas” no llegaron a las reuniones agendadas, sin ni siquiera hasta el momento dar una excusa.
La última reunión fue con el Club Social y Deportivo “La Escuelita”, literalmente un oasis en el desierto, por fin, pudimos conectar con sus socios en una larga jornada que se extendió por casi dos horas y media…surgieron miles de ideas, muchísima información, y por sobre todo un gran interés por parte de sus jóvenes dirigentes con quienes trabajaremos en conjunto no solo en la residencia, sino también apoyando sus propias iniciativas, como un taller de turismo patrimonial y un ciclo de cine al aire libre para niños y adultos de Baquedano.
Las esperanzas reaparecen, las energías se alinean y la luz se asoma de apoco para darnos algunos guiños de colaboración.