BitácoraResidencias de arte colaborativo

Residencia: El lugar de mis cuerpos Teodoro Schmidt, La Araucanía - 2017 Residente: Centro Cultural Teatro Container
Publicado: 2 de noviembre de 2017
Juegos de infancia

Nos levantamos con la lluvia, otra vez. Cuando llueve así, pocas son las ganas que hay de levantarse de la cama. Sin embargo, después de casi 2 meses viviendo en el sur, uno se acostumbra a convivir con la lluvia y se levanta, hace fuego, continúa su vida con el agua que cae, porque ya es parte del paisaje y del cotidiano. Hoy sí nos dedicamos a hacer trabajo de planificación y estuvimos en los computadores durante toda la mañana, mientras tomábamos desayuno y escuchábamos al agua caer.

Y entonces, al poco rato, dejó de llover y salió un sol resplandeciente. Ésta era nuestra oportunidad para preparar nuestras cosas y partir a la escuela, donde necesitábamos hablar con los profesores y posteriormente partir rumbo a Hualpin. Sin embargo, cuando comenzábamos a caminar hacia la escuela, las nubes corrieron rápido y una ráfaga de lluvia casi nos empapó. Por suerte, alcanzamos a guarecernos bajo un gran árbol y esperar a que amainara. No tardó mucho en salir el sol otra vez. Así han estado estos días, las nubes atraviesan el cielo a altas velocidades y el tiempo avanza en una constante de luces y sombras.

Al llegar a Hualpin, pudimos trabajar un poco más en la biblioteca y alcanzar a almorzar antes de ir a reunirnos con las señoras de Vida Nueva. En la reunión, paradójicamente, comenzamos hablando de la muerte, aunque la razón que nos llevaba ahí eran los juegos de infancia. Así, pasamos de hablar de funerales a los más lejanos recuerdos de infancia. Las señoras tomaron una hoja de papel blanco y fueron dejando ahí el recuerdo de lo que jugaban de niñas, dibujándolos y riéndose al recordar. Si bien nosotros ya hemos escogido algunas de sus propias escenas que queremos grabar junto a los niños del club de cine de Hualpin, no hemos dejado de estar en contacto con las señoras, que siguen aportando más material y a las cuáles les preguntamos qué les parece lo que nosotros vamos seleccionando, incluyéndolas de alguna forma también en el proceso de creación de guión. Paralelamente, ellas ya saben muy bien de la muestra – instalación que estamos preparando para la segunda semana de diciembre. Para la próxima semana, hemos organizado un encuentro con ellas y Mayra, nuestra compañera del colectivo que realiza un taller de reciclaje textil. Mayra vendrá a apoyarnos en la confección de vestuarios para el trabajo con los niños en Llaguepulli y, paralelamente, trabajará con las señoras, armando un patchwork de telas, relacionado a sus recuerdos y al trabajo de memoria que hemos venido activando junto a ellas. Ese trabajo estará presente también en la muestra final.

« Ir a residencia