Y los días pasan y yo aun hago todos los esfuerzos para convocar a la comunidad, realmente se me ha hecho difícil esta etapa, ya que, debido a las fechas de fin de año y por otra parte la inexistencia de profesionales del servicio país en la comuna, como tampoco un mediador (a) en terreno, ya que, de todas y todos los dirigentes que conocí hasta el momento ningune cumple con los requisitos mínimos para hacer esta labor, básicamente por falta de disposición e interés.
Con la coordinación regional solo he tenido dos reuniones en las cuales he tenido que viajar a Antofagasta, aprovechando también de hacer compras y conectarme a internet, ya que el dispositivo móvil que contraté con una compañía telefónica, que según los nortinos es la que tiene mayor cobertura, rara vez funciona en Baquedano.
Esta semana me volví a comunicar con Graciela Vega, Presidenta de la Junta de Vecinos N°1 de Baquedano, quien me señaló que no se encontraba en Baquedano y que la volviera a llamar en enero próximo para agendar una reunión con sus socias y socios. Lo mismo me señaló Esmina Campos, Presidenta de la Agrupación Artística Cultural Sergio Vega, quienes podrían participar de la convocatoria a contar de enero próximo.
Será una práctica cultural local la falta de valor en la palabra? o será que ya se institucionalizó esta práctica en todo nuestro territorio? Decir que si, para no quedar mal, comprometerse a cosas porque es políticamente correcto, no ser puntual, ni dar una explicación o excusa cuando sea necesario?
Es impresentable e increíble la falta de respeto cuando me dejan pagando, cuando mienten para quedar bien, la adulación y verborragia sin sentido, sin fin ni fondo, demagogia pura. Tendré que armarme de paciencia, respirar profundo y contar hasta 10 para no estallar, verle lo bueno a toda esta experiencia, para salir fortalecido y al mal tiempo buena cara.
La reunión propuesta por Yasna Quispe, la encargada de Cultura del Municipio y propuesta también por Mauro Robles, Secretario Ejecutivo de la Fundación Cultural de Sierra Gorda agendada para el viernes 21 jamás se realizó, ni confirmó, ni tampoco se reagendó. Según los citados es el Alcalde quien tiene que decidir si apoyará la Residencia de Arte Colaborativo en el territorio, que sin su venia y autorización no se pueden comprometer a apoyar una nueva intervención cultural en la localidad.
Me siento entre la espada y la pared, por otra parte, todavía espero el pronunciamiento de la coordinación regional para que a través de una carta u oficio pidan expresamente a la autoridad local el apoyo y compromiso para la realización de la residencia.
Este 29 de diciembre llega parte de mi equipo de trabajo, la gestora cultural Renata Meza, coterránea con quien trabajé en mi última residencia en la Escuela de Arte de Dunedin Nueva Zelanda, llegará junto a su esposo Michael Schmidt-Voigt quién también apoyará nuestro trabajo desde la tecnología.
En buenahora llegarán, ya que debo reconocer, no ha sido fácil habitar y vivir en esta desolación en donde las condiciones han sido tan adversas, en buenahora llegan a reinyectar buena onda a este proceso.