Sandra Marín
Desde que llegamos a Punitaqui nos dimos cuenta que todos los lugares que reciben a las personas, en general negocios, vulcanizaciones o ferreterías, tenían un letrero “sándwich” afuera. Esto es una pizarra para escribir con tiza o pintura que se lee de ambos lados. Todos los de Punitaqui, averiguamos, están hechos por Parrita. Fuimos de travesía mitopoética en busca de Don Julio Parra. Preguntando de puesto en puesto donde pillarlo. Vaya a “la cosa” ahí está el Parrita, nos dijeron. ¿La cosa? ¿Qué es eso? Es un local que queda en pueblo nuevo donde los dueños son muy amigos de Parrita y tienen su celular. Luego de múltiples derivas (claramente el celular no estaba funcionando) y buenos consejos de los vecinos, llegamos caminando a Villa Pueblo Nuevo donde arriba de una loma, cerca de un relave de minera, entre gallinas, huerta y cercos, vive Parrita. Sonrisa de oreja a oreja nos invita a pasar, nos muestra algunos carteles que tiene en la bodega que nunca pasaron a retirar sus dueños. Nos explica de tipografías, de colores y de pillerías para pintar. Compartimos con él nuestra misión, –¿nos puede hacer un letrero para la Casa de la Cultura?-.
Parrita nos da un presupuesto, luego comienza a construir nuestro diario mural. Luego de una semana nos pregunta si podemos ir en auto a buscarlo. Alejandro, director de la Casa de la Cultura, nos lleva en camioneta y subimos el “sándwich”. Descargamos nuestro anunciador, nuestro megáfono con él, afuera de la sede. Arriba en fondo blanco y letras de todos los colores dice “diario mural de Punitaqui”, abajo todo pizarrón.
Ahora todos los eventos los publicamos ahí. Siempre está afuera anunciando el que vendrá. Es nuestro Instagram/facebook de tiza.