BitácoraResidencias de arte colaborativo

Residencia: Origen natural Quinta de Tilcoco - Localidades: Guacarhue, La Viña, Puente Alta y Quinta centro, O'Higgins - 2017 Residente: Francisca Burgos
Publicado: 8 de noviembre de 2017
Gonfoterio

Nos acompañó un poderoso y reluciente sol, como no lo habíamos visto en esta primavera, brillar cargado de la energía que el verde intenso del valle propaga en el esplendor de la temporada. Las fibras vegetales en los canales y acequias, lucen sus verdosos y maduros tonos, acompañando los cultivos cargados de jóvenes frutas y flores. El trayecto a Tagua Tagua por el puente de El Inca, nos introducía los paisajes de su historia; los colores que lo acompañan, nos cuentan los detalles de lo que ha vivido, en compañía de los seres humanos hace más de 12.000 años atrás.

La palabra era Gonfoterio. “Repitan conmigo: Gonfoterio”, no mamut ni mastodonte, gonfoterio. –“A ver ¿Cómo era la palabra? – Ni usted se acuerda tía” “Acuérdense de congo, kungfu, corfo, kung fu terio. Pero, ¡No se olviden!” Gonfoterio. El Museo Escolar, ubicado en el sector que antiguamente ocupó una de las lagunas cuyo patrón de asentamiento en la historia ha logrado deleitar un sinnúmero de científicos y visitantes, hoy no ha hecho excepción, y ha encantado tanto a artistas, profesores y a más de 30 niños, con los vestigios que nos han dejado los antiguos habitantes de estas tierras, vecinos del valle y de su hogar Quinta de Tilcoco.

Por este día, en Guacarhue y la Puente Alta, podemos decir que sus niños soñaron con ser arqueólogos, paleontólogos, antropólogos, alfareros, caciques, construir puentes como los Incas, o tal vez no, pero estos niños han mirado a sus pies y han visto bajo su huellas, el caminar de la historia, las bondades de su naturaleza y brillando bajo su mismo sol, la vida en su origen natural.

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