Llegamos a Nueva Toltén el domingo 17 en la mañana tras un largo viaje en bus desde Santiago. Dada la fecha de inicio de nuestra residencia recién podremos reunirnos con las integrantes de la Mesa de la Mujer Rural de Toltén pasado el 19 de septiembre, no obstante, en estos días aprovecharemos de reactivar los lazos generados en el primer acercamiento, así como también recorrer los alrededores para observar y comprender cómo lo lafkenche aparece en lo cotidiano de las personas que viven por la zona. Encontramos que la papa tiene un rol fundamental en esto, en específico el cultivo de una papa endémica que crece solo en este lugar: una papa de color morada, alargada, que recibe el nombre de “mojón de gato”. En las diversas conversaciones con personas de la localidad nos han señalado que es distinta a las papas chilotas, y que ha sido recuperada de conocimientos propiamente lafkenche.
Para nuestra casualidad y sorpresa, en la cabaña en donde estaremos durante la residencia nos encontramos en su patio con algunos brotes de papas creciendo. Hemos pensado en ir limpiando el terreno de las piedras para quizás construir una huerta de papas que vayamos encontrando como parte de nuestro proceso y bitácora. Durante la tarde del domingo conversamos con la señora Sandra, dueña de la cabaña, que le sorprendió nuestro interés por las papas, contándonos que la cabaña se construyó hace poco y que sobre ella antes había una huerta de papas nativas. Ante tal coincidencia hemos quedado muy conmovidos, quizás es un mero detalle, al que le pondremos atención porque ha modificado nuestro relacionamiento con el entorno. De solo imaginar cuántas conversaciones y experiencias podremos compartir en torno a esta especie endémica nos anima a esperar nuestra reunión con la Mesa de la Mujer Rural.