Caminando por el pueblo, paso a paso recorro sus calles para ir al encuentro de memorias y relatos, además de invitar a la actividad del sábado. Me encuentro con el antiguo relojero del pueblo que me cuenta se suicidó un viejo vecino de su barrio, tragedia en la población Coyanco que remueve a los habitantes no acostumbrados a acontecimientos tan trágicos.
Sigo caminando y toco la puerta de Aurelio, hermano de Otilia “Tilita” Gonzalez, “la cantora de rodeos”, reconocida cantora y folclorista del pueblo, quien recorrió Chile cantando las canciones que recopilaba por los campos y que creaba mirando las realidades campesinas. Su casa ya no es la misma, es una casa prefabricada post terremoto, se podría pensar que con ella se perdió su patrimonio, pero adentro me encuentro con la sorpresa de que todo está ahí, los cassettes con grabaciones que ella mismo grabó a cantores de otras épocas, fotos de sus recorridos por distintas partes de Chile y de las antiguas calles del pueblo, imágenes con Margot Loyola, su gran amiga y colega, con el dúo Mutrum, además de sus vestidos y zapatos. Tenemos una linda conversación con su hermano que se emociona recordándola.
Sigo caminando y me encuentro con una sede vecinal de la villa San Sebastián donde justo estaba reunido el comité de vivienda de este sector, les cuento del museo comunitario y de su proceso, los invito a ser partes de la construcción de este espacio de todos.
Finalmente termino en la casa de Don Pedro, antiguo campesino que junto a su familia me invitan a tomar once comida, compartimos la mesa, un buen queso putugano recién hecho por su esposa. Surgen recuerdos e historias del mundo campesino, las casas de totora, el haber partido a los 7 años a trabajar, tener que viajar solo 6 horas con la carreta de bueyes a Constitución en la noche, con esa edad parece ser normal para su vida de campesino.
Hoy conocemos más Putú, su gente, sus sabores, dolores y sus historias. Comencé una caminata sin saber bien el recorrido y en estas divagaciones, silencios y conversaciones al paso, seguimos avanzando hacia el reconocimiento de un pueblo en medio de dunas y humedales. Entre el campo y el mar.