Esta es mi última semana en Arica. Luego de proyectar el segundo corte del video en el Jardín Granito de Arena, debemos comenzar a planificar las últimas actividades, evaluación con el equipo de trabajo y las despedidas, que será lo más difícil.
El viernes logramos convocar a bastantes apoderadas del jardín y pudimos también conversar un poco sobre la continuidad que puede tener el grupo de apoderadas que se ha estado congregando para el proyecto. Hay ganas de juntarse el próximo año en torno a alguna actividad, y también de parte de ellas, una crítica a la mayoría que no ha participado. Con Marta y Judith quedamos de vernos esta semana, el jueves y viernes, y también debo volver al jardín a realizar algunas gestiones de cierre.
El sábado hacemos una reunión de evaluación con Ivo, Valentina y Jesenia, mientras estamos todos juntos, al término de un par de semanas intensas. Evaluamos primero la actividad con los niños, que es algo más puntual. Algunas de las observaciones apuntan a la capacidad de los niños a meterse rápidamente en el juego propuesto y participar, aunque no todos se conocieran entre sí. Se valora también el hecho de que muchos hayan acudido por interés propio y no obligados por los papás. Contrastamos un poco la visión de ellos del entorno y el trabajo de sus padres, con lo que se muestra en el documental realizado por las mamás. Finalmente hablamos de los problemas encontrados, en donde la falta de tiempo nos jugó en contra. Si pudiéramos haber realizado más de una sesión, el grupo habría estado más afiatado. Pero la realidad del Agro es otra. Las limitaciones de espacio y tiempo no las manejábamos nosotros. Vimos que para la cantidad de niños, deberíamos haber tenido más apoyo, porque se nos arrancaban a jugar y algunos de forma un poco violenta. También rompieron una puerta del salón de la asamblea, jugando con un carro de carga.
Luego conversamos sobre lo que ocurrió en el jardín para el pre-estreno, y también las actividades que habíamos planificado y no resultaron. Fue un éxito la proyección y vimos cómo las niñas y niños reconocieron a sus familias y a su comunidad en el video. Durante la media hora de video estuvieron muy atentos e interactuaron con las historias. También llegó gente que no participó en la realización y vieron los frutos de nuestros encuentros. Pensamos que fue una buena motivación para el futuro. De las personas que aparecen en el documental, la señora Teresa nos comentó su alegría de haber participado, y ganas de difundir. Comentamos lo importante que fue la presentación de Marta y Judith, quienes contaron un poco sobre el proceso y entonces vimos cómo se habían reconocido como autoras. Ha sido a través de las conversaciones que hemos ido conformando lo común y ojalá estas conversaciones entre ellas continúen. El apoyo de la directora y profesionales de jardín, en este sentido fue clave.
Por último, vemos la necesidad de mostrar el documental en el Agro, cuando podamos generar la instancia, ya que son los protagonistas mismos quienes van a seguir difundiendo. La chance de mostrarlo a la asamblea se vio interrumpida por las nuevas elecciones, que fueron anuladas y se tendrán que hacer de nuevo. Sin directiva, no podemos obtener el permiso de Asoagro.
Tomo nota de los comentarios de cada uno. Y nos ponemos manos a la obra con los afiches y flyers para el viernes 11, cuando mostremos los materiales en el evento de cierre de las actividades de Servicio País en la sede vecinal N 51 de Nueva Esperanza.
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