Lo Castro es una localidad ubicada en el camino que une Lampa con Estación Colina, quedando más próxima a esta última, la calle que las atraviesa se llama Cacique Colin y esta se encuentra a la entrada de Lo Castro. Antes, según la información que nos entregaron, Lo Castro fue un fundo que con los procesos de reforma agraria se expropió. Se caracteriza por tener una calle muy extensa hacia adentro y rodeada de sitios con casas. Según nos cuentan hay personas que viven a una hora y media a pie del camino principal. Las personas para moverse en Lo Castro van en bicicleta, en auto o caminando. No hay ninguna locomoción que una Lo Castro con el camino principal.
El viernes pasado fuimos a la cancha porque las vecinas organizan ahí una feria de las pulgas y según lo que nos contó una de las dirigentes vecinales a estas jornadas las vecinas llevan a sus niñas y niños, quienes se aburren mientras esperan. Por lo que nos pareció importante realizar una intervención con ellos en ese espacio.Llegamos a la cancha y conversamos con Milagros, quien es una de las organizadoras, a ella le contamos nuestro objetivo y nos ayudó a reunir a las niñas y niños que estaban presentes. Preguntamos hasta qué hora estaban y dijo que se quedaban hasta que salieran los zancudos ,es decir, al caer la noche.
Conocimos a Mateo, Valentina, Josefa y Julieta, todos entre 7 y 9 años, organizamos el lugar para trabajar y les contamos el objetivo de la jornada que era la realización de una cartografía textil de Lo Castro, esta intervención estuvo a cargo del proyecto brigada textil. Comenzamos con las preguntas ¿que les gusta y que no les gusta de Lo Castro? para iniciar el mapeo. Entre las cosas que no les gustan estaba una fábrica de aceite de motores que tira un olor desagradable, los autos y los ruidos fuertes. Les gustan sus casas, los animales, la vegetación y la cancha donde estábamos. La metodología rápidamente obtuvo sus frutos y tuvimos nuestro mapa textil de Lo Castro casi antes del anochecer. Con esta jornada inauguramos brigada textil en el territorio.
Por otro lado esta semana estuvimos con Mayra perteneciente a la agrupación de mujeres latinoamericanas de Lampa, nos contó su experiencia y la que han tenido con sus compañeras, las dificultades, la discriminación por ser migrantes, la falta de receptividad que ha tenido el territorio con ellas, entre otras.Coincidimos en que es importante visibilizar estas situaciones, a su vez nos parece fundamental invitar a personas migrantes a participar del proyecto.Con todo esto esperamos abrir espacios y facilitar redes entre las organizaciones del territorio y también potenciar las conexiones con migrantes desde el Patroncito. Las líneas de investigación se van delineando cada vez más. Seguimos.