Si es que -a nivel del colectivo en formación- El Patroncito se ha convertido en nuestro centro operativo y residencial, entonces las reuniones grupales de esta semana estuvieron marcadas por la fuga de ese centro, por su excentricidad en relación al Patroncito. La más crucial de estas reuniones la tuvimos donde Olga, vecina que prestó su hogar (junto al tradicional local el “perro criollo” de estación Colina) para deliberar respecto del co-diseño del proyecto en su siguiente etapa.
Nos pusimos de acuerdo para realizar la primera deriva por Lo Castro el jueves 21 de febrero, junto a más vecinas y vecinos del sector, y fuimos delineando de manera un poco más concreta las actividades y el propósito para marzo y abril. En la segunda semana de marzo quedamos de convocar en Estación Colina a un encuentro para abordar con más precisión y profundidad el tema del agua, en el cual esperamos que participen miembros de la cooperativa de agua potable del sector, de la fundación Batuco Sustentable y de la comunidad dedicada a agricultura sintrópica. También en vísperas del día mundial del agua (22 de marzo) vamos a convocar una jornada de discusión y producción gráfica, atentxs a las movilizaciones locales que se vayan a generar a propósito de la fecha. Por último, quedamos para abril, después de semana santa, de levantar una programación donde se conecten las líneas de trabajo y se visibilicen las áreas de preocupación de la comunidad.
Esquemáticamente, las líneas de trabajo que se están desarrollando de forma colectiva con la comunidad son: 1) Recolecciones de memoria, 2) Brigadas gráficas, 3) Derivas etnográficas, 4) Exploraciones en el cuerpo emotivo, mientras que las áreas de preocupación son: 1) Sequía, saqueo y desertificación, 2) Falta de áreas verdes y comunes (nosotrxs añadiríamos: con enfoque intercultural y ecológico), 3)Falta de incidencia y participación en la planificación comunal (Pladeco, plan regulador), 4) Cultura patriarcal y machista en las relaciones sociales locales.
Fue una semana orientada hacia la planificación, pero donde también tuvimos oportunidad de conocer a algunos vecinos y vecinas que no se habían involucrado hasta ahora, y con quienes esperamos seguir generando conexiones, vínculos y colaboraciones. Junto con la comunidad ya vamos sintiendo la necesidad de una pausa a fines de febrero, para retomar a comienzos de marzo nuestras actividades.