Esta mañana nos vino a visitar la señora Julia Villanueva con su amiga Leonarda para preguntar si la podíamos incluir dentro del proyecto a lo cual accedimos y además le dijimos que si tenía más amigas que les avisara, nos percatamos que andaban hilando con una “puska”, así se le llama al tipo del huso que utilizan acá para retorcer y enrollar la fibra que dará origen al ovillo, nos dicen que así logran sacar algo más de dinero ya que la fibra se puede comercializar a mejor precio en Arica, mi compañero Matías quedó absorto al ver como la señora Leonora hacía bailar la puska haciéndola girar en el aire como si fuera un pequeño armonioso torbellino, su tamaño es bastante pequeño en comparación al huso que utilizan en el sur de Chile para la lana de oveja, además el grosor del hilado de la fibra de alpaca es bastante más fino. En una larga charla nos contaban que la fibra de alpaca es más liviana, suave y térmica que la de oveja, por eso es más valorada en el mercado.
Fuimos a almorzar donde la señora Julia Flores y mientras tanto conversábamos nos comentó que ella teje a palillo y telar de 4 pedales, nos dijo que podríamos hacer algún tipo de tejido con lana de alpaca, ella hace diseños simples pero le interesa rescatar diseños más complejos como figuras de animales y simbología aymara así que también pensamos que podríamos experimentar con el telar de la señora Julia e ir donde don Juvenal para comenzar a entrecruzar lo saberes de diseños de alfombra. A eso de las 9:00 pm nos retiramos de la casa de la señora Julia donde nos pudimos conocer y conversar de todo un poco, contándole acerca de nosotros y ella de sus animales, su vida aquí y el clima, ella, otras y otros pastores dicen que falta el agua de lluvia sobre todo para sus animales que están enflaqueciendo, en otras estancias muriendo, dicen que hace unos años atrás era diferente había más pasto, más verde y comida para los animales, todas y todos aquí están esperando la preciada lluvia, nosotros también esperamos que la lluvia llegue pronto.