Durante las primeras jornadas del lunes y del martes, pudimos reunirnos con lxs profesores de ambas escuelas (Punta de Choros y Los Choros) para conversar acerca de los procesos pedagógicos que entre todxs llevamos adelante.
Siempre las dos escuelas trabajaron en conjunto, la realidad de la colaboración entre proyectos educativos vecinos ha sido fundamental para compartir experiencias y por sobre todo, para crear métodos o estrategias constructivas para el florecimiento crítico, y principalmente, con sentido de pertenencia con el territorio. A través de valores y principios ético-políticos que le permitan a lxs estudiantes llevar adelante proyectos y aprendizajes vinculados a mejorar las relacionales humanas y un sentido social más justo con todo el sistema medio ambiental, lo cual implica nuestro propio actuar con todo lo que exista en el planeta.
Luego de derivar por varios campos en una charla honesta y muy generosa, nos dispusimos a pensar el espacio más apropiado del patio para instalar las piezas construidas en esta residencia escolar.
Desde luego, lxs niñxs terminaron rápidamente de producir sus objetos. Teniendo la misión muy clara de comprender la importancia de destacar los elementos y cómo estos pudieran comunicar a la población su legado histórico.
Con ambas escuelas pudimos reflexionar sobre la necesidad de intervenir los espacios del pueblo y de la caleta. Esto a su vez, para visibilizar contenidos críticos y de alguna u otra manera, ejercer una práctica creativa-artística abierta y democrática con el territorio.
Para eso, se manifestó la posibilidad de seguir interactuando con el espacio público a partir de sus centros sociales como la escuela, la iglesia, jj.vv, sindicados, etc. más la ocupación decidora de la misma calle. Lo cual nos permitirá seguir creciendo en torno al lenguaje y la pertenencia.