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Residencia: Llegó de Melinka Melinka - Centro Cultural Ascención, Aysén - 2019 Residente: Paulina Martínez Marín
Publicado: 1 de marzo de 2020
Llega un archipiélago

¿Cómo le explicamos al resto qué es lo que hicimos? pregunta Carla durante el montaje de la exposición ¿Qué Llegó de Melinka? Porque fueron muchas cosas distintas y a ratos es difícil darles un hilo coherente que las una a todas.

Hay varias partes…

Las preguntas. Testimonios de los encuentros fortuitos que tuvimos, de esos reclamos, esas preocupaciones, esas maneras de mirar la isla. Ahora se hacen públicas en su conjunto. En una red de conexiones que interrogan al visitante y lo invitan a buscar respuestas. Algunas de ellas presentes en los mapas, otras debajo de conchas, y quizás rebuscando entre las fotos antiguas aparecen nuevas respuestas.

Luego están las iniciativas que armamos a partir de esas preguntas: el programa radial, el juego “yo quiero aquí”, el archivo de fotos… Se ubican todas dentro de una gran mateada, que nos recibe en el Centro Cultural Ascensión, invitando a otros a participar y que abren la conversación, a su modo, sobre la identidad Guaitequera.

De la identidad Guaitequera también habla el video. Fragmentos de la isla que fue archivando Pilar, para acercarse a comprender qué significa ser isleñ@.

 

Fueron distintos intereses y motivaciones que trajo cada un@, pero que tienen algo en común: buscar la conversación. Escucharnos, compartir con el otr@, saber qué piensa y siente sobre la isla. Saber en qué te puedo pedir ayuda, cómo puedo colaborar, por qué pensamos distinto… De ese modo el día de la exposición nos reunimos una vez más a conversar. De Melinka, Repollal, de los de afuera. Sobre cómo proteger lo que tenemos o qué imaginamos cuando soñamos la isla.

 

Conversando con la Jose, Pilar y Santiago nos llama la atención lo presente que está la identidad de la isla. Lo sienten y expresan l@s isleñ@s y también lo pueden reconocer a simple vista quienes vienen llegando. Y como buen archipiélago, se conforma por partes; pedazos de historias revueltas y vueltas a contar, fragmentos de postales de un lugar o tal familiar casi olvidado, trozos de mapas, animales y objetos que trajo el mar. Como también esbozos de ideas de algo que podría suceder, mientras jugamos a tener la posición de la industria salmonera o del perro.

 

Paulina

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