Como cada lunes hoy nos reunimos con algunos vecinos de la villa José Donoso. Hace un par de semanas habíamos terminado de trabajar con una línea de tiempo y para esta ocasión quise proponerles que trabajáramos en torno a un plano de la villa.
Nos sentamos alrededor de él con lápices de colores y algo para comer. La idea era que cada uno de los vecinos identificara un lugar específico de la población con el cual tuviera alguna significación especial, alguna relevancia dentro de su experiencia y que lo marcara en el plano con algún símbolo y nos contara el porqué de su elección.
La herramienta del plano es un recurso interesantísimo para conocer un poco más de cerca el modo en que los vecinos construyen su espacio mediante procesos de significación, vinculados estrechamente a su historia de vida. A partir del relato de cada uno se dio inicio a una conversación diferente. De este modo abordamos temas tan diversos como:
Experiencias individuales durante la etapa de postulación a las viviendas.
La descripción física de la villa en sus primeros años.
Conflictos actuales por la ocupación de la cancha de baby fútbol.
Los cursos de agua que corren bajo la villa.
La tala de un viejo sauce.
Casas poseídas por espíritus.
Una serie de conflictos amorosos que sucedieron en cierto sector de la villa.
Una esquina donde ocurrió un crimen.
La feria navideña.
Con esta reunión dimos por terminado el trabajo de mesa junto a los vecinos y comenzamos el trabajo de rodaje. Como expliqué en una entrada anterior, los vecinos eligieron a una familia específica de la población como la más representativa y es a ellos a quienes entrevistaremos en una próxima ocasión.