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Residencia: Espacios comunes. Lecturas colectivas en torno al territorio. La Pintana, Región Metropolitana - 2018 Residente: Francisco Cooper Marzal
Publicado: 14 de febrero de 2019
Vilma

A medida que se ha desarrollado esta residencia en el sector de Santo Tomás, hemos ido conociendo a diferentes dirigentes vecinales, cada uno con una admirable vocación de servicio a la comunidad, y al mismo tiempo, con perspectivas muy diferentes sobre la forma de trabajar para ella. No obstante, todos los dirigentes conocidos nos han indicado en algún momento que existe una dirigenta en particular a quien debiéramos conocer. Se referían a la señora Vilma Espinoza, dirigenta de la villa San Alberto, a quien hoy día hemos entrevistado.

A la señora Vilma la fuimos a conocer hace unos días atrás, ocasión en que le contamos sobre nuestro proyecto y el trabajo que hemos estado realizando desde el mes de octubre del año pasado. Ella por su parte, nos introdujo en torno a su labor como presidenta de su Junta de Vecinos. También le consultamos si podíamos entrevistarla para el documental, a lo cual accedió.

Por ello hoy día llegamos a la villa San Alberto, que está ubicada al norte del sector de Santo Tomás. En su entrevista, Vilma nos contó respecto a grandes luchas que ha dado como dirigenta vecinal con la empresa que construyó la carretera Acceso Sur, y con el cambio del plan regulador para permitir construir en el terreno de La Platina, un sitio al sur de Santo Tomás, cuyo uso era agrícola y donde ahora se pretenden construir nuevas viviendas.

Sabemos que estas y otras gestiones -que han durado años- han posicionado a la señora Vilma Espinoza como una de las dirigentas más respetadas de toda la comuna de La Pintana. Sus proyectos tienden a involucrar a otras poblaciones del sector, y de algún modo están siempre vinculadas con atender el problema principal que ya a esta altura de la residencia hemos detectado en el territorio – y que el diagnóstico de la señora Vilma nos confirma-: la mala planificación urbana del sector, la cual desde sus inicios generó múltiples conflictos en la vida diaria de sus habitantes, y determinó una barrera difícil de sortear para mejorar la calidad de vida de los vecinos.

Con la señora Vilma podemos visualizar mejor que los problemas de hoy son efectos de malas políticas del pasado, y que es en atención a ello donde hay que resolver el presente. Su perspectiva histórica y también su manejo técnico de los problemas que aborda le otorgan una lucidez encomiable, y de algún modo nos ofrece una síntesis de nuestra indagación en el territorio. Conocerla a ella fue como la primera parada de una ruta que comenzamos a caminar sin parar hace cuatro meses y que nos ha llevado a ser testigos de un mundo lleno de complejidades y al mismo tiempo hermoso.

Se me figura que eso es la Pintana, o por lo menos el sector de Santo Tomás, un humilde pueblo abandonado en el desierto.

Ya estamos llegando al final de nuestro trabajo en el territorio. Aún quedan algunas interesantes entrevistas por hacer y todavía nos resta la segunda mitad del trabajo, que tiene que ver con la postproducción del documental. Pero hasta ahora estamos contentos porque hemos podido aprender y registrar, conocer y dar lo máximo de nosotros en pos de los objetivos de esta residencia. Esperamos también poder ser y haber sido un aporte al lugar. Eso sólo los vecinos lo dirán.

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